A los residentes de la generación COVID les cortan las alas (no si lo podemos evitar).

Tal y como están las cosas, los residentes que finalizan su formación en Septiembre, de nuevo se verán perjudicados: es materialmente imposible que dispongan de toda la documentación necesaria para su inclusión formal en la bolsa de empleo con méritos actualizados  antes de que finalice el plazo el 30 de Septiembre. La generación que tuvo que ver como su formación y su retribución como médicos residentes se ponía en pausa durante más de 4 meses. Imagina pasar la última entrevista para un buen puesto de trabajo en Mayo y que te digan “no abrimos hasta Septiembre”, sabiendo que, en toda tu carrera profesional, cada día trabajado CUENTA.

Desde el SESPA han habilitado la “minibolsa” para cada categoría donde sólo los de esta generación pueden aportar méritos y de forma limitada, para competir entre ellos. Pero la minibolsa está diseñada para cuando finalizas en Mayo, porque podrás entrar con tiempo en la bolsa general y actualizar con los demás en Septiembre. Pero cuando finalizas el 20 de Septiembre y sabes que no hay tiempo material para entrar en bolsa ni actualizar nada hasta el año que viene… es como si te quedases en la “minibolsa” un año entero…  algo que es a todas luces INJUSTO.

Han pasado por todo tipo de vicisitudes para sacar a delante su periodo como residentes: reorganizar todo su calendario de rotaciones a tenor de las oleadas de Covid19, tutores que no se leyeron aquel párrafo del juramento hipocrático que decía que instruirás a “todos los discípulos unidos por juramento” y decidieron firmar una carta, al final de la pandemia, en la que renunciaban a la docencia… y un sin fin de dislates hasta llegar a la línea de meta.

El retraso en la finalización de la residencia es más que un castigo, pero aún peor es saber que cuando accedes al mercado laboral, después de 10 años de formación, te cortan las alas. Si no pueden estar en bolsa, con méritos actualizados, no podrán competir por mejores contratos, las vacantes que se puedan ofertar tras la estabilización. Y como al SESPA le encanta enrasar a los trabajadores (por ejemplo, postergando 10 años el acceso extraordinario a la carrera profesional) los residentes que finalizan ahora estarán a la par que los que finalicen en Mayo de 2025, hasta Septiembre, cuando se reabra la actualización de la bolsa de empleo. 11 meses que se van a hacer muy largos, pensando que en cuanto termine la siguiente hornada ni el tiempo trabajado ni los méritos… nada evitará que en el verano estén todos en igualdad de condiciones.

Por eso hemos pedido que en la próxima Mesa Central de Contrataciones se incluya, de forma URGENTE, un acuerdo que otorgue una prórroga extraordinaria en el plazo de aportación de méritos para la bolsa de empleo a los residentes que terminan. La propuesta ha sido bien recibida por el SESPA, a la espera de la necesaria negociación. Veremos cómo se concreta.

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