La convocatoria de la OPE en la categoría de Médicos de Urgencia Hospitalaria, como toda oferta de empleo pública, presenta los claroscuros habituales en nuestra Comunidad Autónoma: a la satisfacción por poder disponer de una oportunidad de acceso a la plaza en propiedad, se contraponen la escasez de plazas ofertadas en un colectivo con una tasa de eventuales estructurales altísima, la tardanza entre ofertas (la previa es de 2008), y un largo etc.
Sin embargo, en esta convocatoria se ha generado un malestar inmediato muy grande, no ya por el fondo de la misma, de análisis como digo más complejo, sino por la forma en la que ésta ha sido redactada, y mas concretamente la redacción del temario de la misma, publicado en el BOPA del pasado 21 de Enero y que ha despertado la indignación de todos los médicos de la urgencia hospitalaria que se han dirigido a mi (tanto los futuros opositores como a los propietarios de plaza). Como Delegado Sindical reconozco los límites negociadores que nos asisten, pero como Médico de Urgencia Hospitalaria no puedo dejar de compartir y transmitir la opinión unánime. Parece que más que un temario para Médicos Especialistas se trata de una broma al banalizar patologías con términos anacrónicos como “Palpitaciones”, “Dolor en Flanco”, “Visión borrosa”, “Fatiga”, “Hemorragias internas y externas” “dislocaciones”, “Sedación consciente”, “Manejo del dolor de Espalda agudo”.
Se trata de una falta de rigor científico en la redacción de este temario, que sin entrar en otras disquisiciones, da la sensación de una falta de respeto o incluso de menosprecio hacia un colectivo de médicos que en el día a día realizamos nuestra labor de atención al paciente de una manera rigurosa y científica, que nos lleva a una continua formación y actualización de nuestros conocimientos tratando de mantenernos al nivel que nuestro trabajo y el paciente precisa, alejándonos y ya dejando atrás aquel antiguo concepto de “médico de puerta” a la que la redacción de este temario parece tratar de llevarnos .
Por tanto considero que los facultativos especialistas de la Urgencia Hospitalaria -con mayúsculas- estamos de sobra capacitados para solicitar el único desagravio posible a sus autores: la redacción de un nuevo temario o la adaptación del mismo a la realidad y terminología científica actual.
José Antonio Méndez
Médico de Urgencia Hospitalaria. Hospital de Cabueñes.
Delegado sindical SIMPA en el área V (Gijón).