Lo que no consiguió el incremento del copago farmacéutico mediante la incorporación de los pensionistas al abono de las medicinas, ni tampoco la amenaza de cobrar un euro por visita médica, lo logró la receta electrónica. Desde su implantación a lo largo de estos últimos cinco años, las consultas en los centros de salud del Principado han disminuido de forma significativa. La contención en la demanda asistencial se ha alcanzado, por tanto, no mediante políticas de recorte sino gracias a reducir la carga burocrática que concentran a diario las consultas y que era una de las demandas de los profesionales en estos últimos años.
La receta electrónica ahorra 1,6 millones de consultas en los centros de salud
Hasta 190 pacientes participan en ensayos clínicos en Asturias