La Atención Primaria (AP) es la base del sistema sanitario público español. El médico es el profesional esencial para que la AP funcione.
Por tanto, queremos hacer constar que:
1. La situación de la AP en España es crítica por el abandono y la falta de recursos. Los Médicos de Familia y Pediatras no pueden seguir trabajando en las condiciones actuales.
2. La saturación de las consultas pone en peligro la seguridad del paciente y genera un enorme desgaste profesional, incrementando exponencialmente los riesgos psicosociales de los médicos
3. Las dificultades para la contratación de Médicos de Familia y Pediatras deben abordarse a medio y largo plazo con aumento de plazas MIR, y a corto plazo con una mejora de las condiciones laborales, que hagan atractiva la AP para los médicos jóvenes.
4. La cobertura de las ausencias debe ser retribuida.
5. Las condiciones laborales de los médicos que cubren la atención continuada y de los sustitutos deben mejorarse.
6. Las condiciones laborales de los Médicos de Familia y Pediatras de AP deben ser homogéneas en toda España y deben equipararse a los países de nuestro entorno europeo para evitar la huida de los médicos jóvenes a otros países.
7. Es imprescindible que la Administración ponga en marcha medidas de control de la demanda que mejoren la eficiencia de la AP.
8. La “violencia sanitaria” contra los médicos y otros profesionales de AP es inaceptable, y debe tener tolerancia cero desde la Administración y desde la sociedad.
9. Las administraciones sanitarias deben abordar, de forma urgente, todos estos problemas (dificultades para la contratación de médicos, condiciones laborales, saturación, violencia…) para evitar el colapso de la AP y del Sistema Nacional de Salud.
Madrid, 19 de octubre de 2019