Ayer nos convocaron a la primera reunión para exponernos la reorganización del nuevo mapa sanitario en 3 áreas. Acudieron la consejera, el viceconsejero, el gerente del SESPA y la directora de profesionales del SESPA, así como el resto de los sindicatos.
Esencialmente presentaron un documento explicativo del porqué es necesario el cambio, en su opinión, no del cómo ni del qué se va a cambiar. Dos de sus ejes fueron la atención a los usuarios y la gestión, lógico que quieran que mejore, pero para ello no es necesario 3, ni 8 ni 24 áreas, con disponer de mejores transportes públicos, una buena educación sanitaria y para la salud, y una buena coordinación de la red asistencial, daría lo mismo. El asunto clave, que la propia Consejera reconoció que no figuraba desarrollado, era el de los profesionales. Le pareció que desconfiáramos de los único claro, con la normativa actual, se establece una movilidad indefinida dentro de la nueva “SuperÁrea Sanitaria”. Y es que, por ejemplo, los FEAs somos FEAs, no tenemos “destinos funcionales” como por ejemplo en atención primaria por un cias, y de esta forma, la movilidad entre hospitales dentro de un Área (por ejemplo HUCA y Naranco) lo definen los propios jefes de servicio, y de facultativos sólo el SAMU tiene reunificación interna (de forma similar a enfermería), así que todo este modelo de destino funcional está por definir.
La Consejera negó la mayor: “no se trata de movilizar profesionales”. También habrá que cambiar el pacto de contrataciones para dejar claros qué “destinos” se ofrecen y cómo se gestionan. También la definición de los puestos es importantes de cara a la provisión de traslados… y no digamos para otro de los meollos de la cuestión, que es definir los “puestos de difícil cobertura “y su necesaria incentivación.
Todas estas modificaciones normativas y laborales sin las que no puede avanzar ningún mapa sanitario, es el factor limitante evidente.
Quedaron en realizar un cronograma y comenzar la negociación. Empezaron diciendo que terminaría en marzo y acabaron reconociendo que antes de junio esto no se termina (hay muchos actores implicados partidos políticos, organizaciones sindicales, asociaciones de ciudadanos, alcaldes…).
Si estas negociaciones sirven para arreglar todos estos problemas pendientes que tenemos los facultativos asturianos, que al final se llegue a un mapa u otro va a ser los de menos, será positivo para los facultativos. Si no se solucionan, tendremos un conflicto. En toda la reunión mostraron un talante dispuesto a dialogar, a aceptar propuestas y solucionar los temas. Lo dicho, acabamos de empezar.