El acuerdo modifica el sistema de guardias para dar cobertura a las urgencias: «Es necesario acudir al sobreesfuerzo de los profesionales»
El acuerdo para reorganizar la Atención Primaria, y más concretamente la asistencia sanitaria fuera de las consultas de mañana, ya es norma. Con su publicación, ayer, en el Boletín Oficial del Principado de Asturias (BOPA), las nuevas condiciones de trabajo pasan a implantarse en las ocho áreas sanitarias que existen en la región, después de una primera prueba en los centros de salud de la comarca de Avilés que está causando más complicaciones de las que cabía esperar.
La reorganización prevista implica, según se expone en el documento que acaba de entrar en vigor, «la integración de los Servicios de Urgencias y las distintas modalidades y categorías que trabajan en Atención Primaria para mejorar la continuidad asistencial y dar mayor flexibilidad a la dotación de ambos equipos». En el ámbito urbano, con el propósito de «dar una mejor respuesta a la población», se pretende además «abordar el denominado ‘síndrome del centro vacío’, derivado de la presencia de un único equipo asistencial por centro de salud», lo que supone un sobreesfuerzo para los profesionales y acarrea a los pacientes largas esperas.
Entre las medidas acordadas, destaca un cambio en el sistema de guardias que ha puesto en pie de guerra a un grupo de médicos de Familia. A partir de hoy, todos los facultativos de los centros de salud están obligados a hacer guardias los fines de semana -una cada mes y medio- y los titulares de plaza se han remontado al considerar que esta obligación socava los derechos adquiridos y su calidad de vida. Como primera medida de presión, cincuenta profesionales han renunciado a su actividad docente como tutores de los futuros médicos residentes (MIR).
Más información: https://www.elcomercio.es/asturias/entra-vigor-reordenacion-atencion-primaria-asturias-sanidad-20230225215204-nt.html