La respuesta de la Administración a la situación generada en el Centro de Salud del Naranco en Oviedo, ha sido la de dejar a un solo médico para atender los domicilios de una población de más de 220.000 habitantes. Quien tenga que tomar la decisión para reorganizar de manera urgente la atención en la Atención Continuada en la zona urbana, debería ponerse las pilas y optimizar el número de dispositivos necesarios para garantizar una adecuada asistencia a los ovetenses, así como su adecuada dotación de personal para dar respuesta a las necesidades de los usuarios.
Por cierto, ¿dónde está la Directora de Asistencia Sanitaria del SESPA (Dra. Játiva)?
La reorganización de la atención continuada en Oviedo desata las críticas