El miércoles se realizaron algunas de las habituales ceremonias de recepción formal de los nuevos residentes en sus centros por parte de gestores sanitarios, unidades docentes y algún cargo político. El objetivo como siempre era que se sintieran bienvenidos con frases amables y consejos tópicos, huyendo de emociones fuertes y polémicas.
Entre las presentaciones nos impactó una reseña en prensa de lo explicado por algún miembro de la Administración del HUCA a los recién llegados. Evidentemente, la primera intención para un neófito alejado de este mundo es pensar que quien la profirió no tenía ni idea de qué hablaba o que padecía alguna enajenación mental transitoria, pero lo que para un común serían dislates, nuestra avispada percepción sindical detecta otra cosa: está dicho en lengua barbárica gestorial, dialecto difícil de interpretar salvo para nosotros
Tenéis la reseña en El Comercio . Las frases que suenan tan extrañas, son estas:
“Sois unos privilegiados por poder continuar vuestra formación con un contrato, unos derechos laborales y unas retribuciones.”
Lógicamente a cualquiera le sonaría a “Je, je, vosotros recién llegados de estudiar como animales, no sabéis nada del mundo laboral , y os vamos a hacer creer que eso de pagar por trabajar y tener un contrato es un privilegio, no un derecho”. Pero nada más lejos de la realidad, en lenguaje sindical significa: “Aquí vamos por el libro. Respetamos vuestros derechos, que son eso, derechos, no privilegios. Vuestros contratos estarán en regla y os pagaremos puntualmente lo que establecen las tablas retributivas, que bastante poco es. Naturalmente, siempre podréis consultar con vuestros representantes sindicales. Bueno es el SIMPA para dejar pasar un contrato o una nómina que no se atenga a la Ley¨. Todo eso, hacednos caso, está bajo es aparente sobreactuación.
“Trabajareis 1.526 horas anuales en jornadas ordinarias de ocho de la mañana a tres de la tarde, además de siete guardias al mes, «límite que se puede superar» a medida que los nuevos sanitarios vayan avanzando en su formación especializada. “
De nuevo un persona poco versada creerá escuchar “Jo, jo, jo, como no tenéis ni idea de vuestros derechos, vais a cubrir todo lo que os mandemos y chitón. Y a medida que progreséis, os mandaremos más”. Craso error, lo que dice es: “Aquí se respeta escrupulosamente la normativa vigente, vuestra jornada es la de los adjuntos, con carácter general 1519 horas (1526 los bisiestos) ajustada por diversos factores, como las libranzas de guardia. Además no podéis hacer más de 102 horas de guardia al mes en promedio (entre 5 y 6 guardias), salvo acuerdo mutuo, y vuestra legislación nacional impide que hagáis mas de 7 al mes nunca, estamos hartos de oír al SIMPA recordarlo, como para encima no atenernos. ” Pues claro, no puede ser de otra manera.
«Hay una atención continuada que cubrimos como podemos, porque muchos profesionales en ejercicio están entrando ya en una edad que les exime de hacer jornadas complementarias. Y vosotros sois lo que tenemos a mano»
Otra vez más un desconocedor de las profundidades del alma administrativa oye “Jua, jua, jua, a medida que la plantilla envejece y hace menos guardias, como no supimos planificar el recambio generacional, vosotros sois la mano de obra barata que va a compensar.”. Para nada, para nada, para nada, lo que dice es: “Aquí se respeta escrupulosamente el derecho a dejar de hacer guardias a los 55 años, derecho defendido y recuperado hace poco por el SIMPA tras 10 años, con vuestro derecho a llevar un equilibrio entre la responsabilidad progresiva y el nivel de formación, no seréis nunca “falsos adjuntos” que cubran carencias de sistema.” Vamos, meridiano.
«En breve los residentes van a recuperar el cien por cien de su paga extra», recortada hace diez años a los funcionarios con motivo de la crisis económica. Aunque en junio posiblemente no»
Este inserto publicitario no hay que entenderlo como “mirad si somos buenos, que este año después de 10 años como reivindicación del SIMPA, empezáis a cobrarla integra, vosotros que cobráis menos y nos salís muy barato. Los adjuntos por ahora, ajo y agua. Eso si, a ver cuando la cobráis, que los R4 y R5 ya ni la van a oler”. Hay que afilar la oreja para captar los matices: “la paga extra íntegra, como ha reivindicado históricamente el SIMPA, se empieza a recuperar primero por los residentes, que en breve la cobrarán todos integra, para que al llegar a adjuntos la sigan cobrando. Y estamos valorando muy en serio la propuesta del SIMPA de que cobréis en junio y retroactiva cuatro años”. Algún avispado puede pensar que la traducción es muy poco fiable, pero os aseguramos que nuestro traductor es mejor que el de Google.
En fin, queridos compañeros en formación que llegáis a este mundo, oído lo oído y leído lo leído, no atribuyáis tales despropósitos lingüísticos que la conferenciante tenía muy mal día y los nervios le hicieron olvidar la legislación vigente o a que la periodista era un perversa fullera que aprovechó un discurso neutro para alterarnos la paz dentro del mundo médico. Simplemente alguien colocó sin filtros unos fragmente escritos en al misma materia de la que están hechas las barbaridades laborales de la Administración. De estos textos, que si se toman al pie de la letra revolverían las entrañas de cualquier médico o facultativos de bien, se deducen dos grandes enseñanzas para vosotros:
1.- AFILIAROS AL SIMPA, QUE OS VA A HACER FALTA. Sólo nosotros somos todos médicos y facultativos que defendemos a médicos y facultativos. Y para los residentes la afiliación es gratis.
2.- ANIMAD A VUESTROS RESIS MAYORES A QUE VAYAN A VOTAR EN SUS ELECCIONES SINDICALES DEL 16 DE MAYO. Por todos, por los residentes que sois y los adjuntos que seréis, para que nunca nadie tenga que volver a sangrar por los oídos con tales desvaríos. Vosotros aún no estáis en el censo, pero ellos si. Que voten a CEMSATSE (SIMPA + SATSE). Recordádselo. Ellos lo entenderán a la primera.
Se lee cada cosa, que como no aprendáis a defenderos, van a conseguir que salgáis corriendo sin mirar atrás, y con razón. Si a los gestores sanitarios no les importa que la residencia sea un fuente de sufrimientos y desánimos, en vez de aprendizajes y satisfacciones, a los que ya somos mayores y velamos por la dignidad laboral de esta hermosa y dura profesión, si que nos importa. Como no vais a importarnos. Sois nuestros hijos en el sentido docente, no nuestros esclavos en el sentido laboral . Sentíos bienvenidos. Pero arrimaos a quien os cuide y os ayude, por Dios.