El Consejero de Salud del Principado de Asturias lleva bastantes más de 100 días en el cargo. Hasta el momento ninguna mala palabra, pero tampoco ha llevado a cabo ninguna buena acción. La situación asistencial continúa en caída libre, sin posibilidad de ser salvada dada la escasez de profesionales. La realidad es que no hay médicos. Resulta imposible cuadrar las cifras para cubrir las necesidades asistenciales de la población. Los que se forman se van, los que se han ido no quieren volver, y los que se han quedado están hartos. Se han pedido mejoras en las condiciones laborales, que no acaban de llegar (Consejería y Servicio de Salud); y también mejoras retributivas, para las que no hay ni parece que habrá presupuesto (Consejería de Hacienda y Función Pública). Los mimbres de este cesto no parecen ser los más adecuados para soportar los próximos meses…